FUENTE DE PIEDRA
Lugares con Historia
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LOS INICIOS
DEL
CAMPO DE FÚTBOL
Si el deporte en general ha sido una constante entre los vecinos de Fuente de Piedra a lo largo de su historia, el fútbol se lleva la palma.
En la postguerra, los jóvenes se reúnen en las eras de la periferia del casco urbano para practicar este deporte. Lugares como El Retamar, La Casería, Los Castillejos, Los Villares, La Fuentecilla la Rana o La Noria son lugares en los que la amplitud del terreno permitía desarrollar el juego de pelota, especialmente en época veraniega.
Muchos equipos se formaron para practicarlo, unos colegiados oficialmente; otros, creados de forma esporádica para competir por el trofeo de la patrona o acudir a localidades próximas para disputar el que ofrecía en sus fiestas los pueblos vecinos, o competiciones surgidas por cualquier evento de relevancia. Resultado de esto ha sido la aportación villafontense de un gran jugador: José Antonio Salguero García, que escaló clubs hasta llegar al Real Madrid en la década de los ochenta.
La preocupación del municipio por contar con un Campo de Deportes despierta a finales de la década de los cincuenta, momento en que la economía empieza a mostrar síntomas de recuperación. De hecho, en 1961 queda patente el ánimo de los aficionados por la adquisición de un terreno destinado en primera instancia para el fútbol, amén de otros deportes. El Ayuntamiento, haciéndose eco de la voluntad popular, toma nota y deja reflejado en acta:
«[…] también se dio cuenta de las gestiones hechas por aficionados de este pueblo interesándose por la compra y cercado de un Campo para deportes y muy especialmente para la práctica del fútbol. Se acordó que sea consultado el propietario D. Ramón Checa Luque y familia sobre la situación y venta o cesión en aquellos terrenos y seguidamente se hagan las debidas y oportunas gestiones cerca de los Organismos Superiores para la forma de dotar a la afición de fuente de Piedra de un lugar de expansión y recreo tan necesarios en la vida actual […]»[1]
En las gestiones realizadas no se alcanzó acuerdo alguno; habrían de pasar varios años hasta que la Corporación vuelve a hacerse eco en 1967 de la firme voluntad popular, retomando el tema y delegando en tres de sus concejales. El acta que recoge la situación dice:
«[…] Los Concejales Sres. Checa Luque; Mateos López y Acuñas Rubio exponen la necesidad de que Fuente de Piedra cuente con un Campo de Deportes haciendo varias propuestas y sugerencias todas ellas encaminadas a la instalación deportiva en el menor tiempo posible, dado el auge e interés que ello supone para la juventud. Se acuerda delegar en los mencionados Sres. para que desde ahora se vea la posibilidad, de adquirir, en propiedad, el terreno necesario y capaz, y que este, de ser posible, esté cercano al casco urbano para así hacer más fácil la ida por toda case de personas encomendándose que la cantidad minima que se precisan debe ser del orden de los diez mil metros cuadrados y en la forma regular que pueda incluirse un Campo de Fútbol, dato éste imprescindible […]»[2]
Un mes más tarde era adquirido el terreno ubicado en el paraje llamado «Los Villares», según reza en acta con las siguientes condiciones:
«[sic] Acto seguido se centró un debate sobre la adquisición del terreno para Campo de Deportes llegándose a un completo acuerdo en cuanto al lugar de emplazamiento que bien debía ser el denominado ‘Los Villares’, frente a la ‘Huerta Montero’ que está muy cerca del casco urbano y reúne excelentes condiciones para ello. Al darse la circunstancia de que dicho terreno es de la propiedad del Sr. Alcalde y familia se entró inmediatamente en trato, consiguiéndose que D. Antonio Acuñas Luque accediese gustoso: ofrece el indicado lugar, pidiendo la suma de 7 ptas. por metro cuadrado. Todos los Sres. Concejales estimaron que era una cantidad aceptable y por tal motivo quedó concertada la operación de compra-venta entre D. Antonio Acuñas Luque y familia como vendedores y el Municipio de Fuente de Piedra como adquiriente. La cantidad mínima de metros a adquirir es de diez mil. El Ayuntamiento garantiza el pago de treinta mil ptas. y confía que el resto será obtenido en suscripción popular entre todos los vecinos y propietarios del término. El otorgamiento de escritura se hará al Ayuntamiento de esta villa, y en la misma, obligadamente, aparecerá una cláusula que impida darle a estos terrenos otro destino que no sea Campo de Deportes [...]»[3]
El tema había cogido impulso y dos meses más tarde se recibía una subvención para el citado Campo de Deportes, cuyo destino quedó desglosado en:
«[sic] Seguidamente, el Sr. alcalde hizo saber que habían sido concedidas por la Comisión de Servicios Técnicos 150.000 ptas. para el Campo Municipal de Deportes y que era necesaria la confección del Proyecto y Presupuesto para presentarlo en aquel organismo a fin de que saliera a subasta, acordándose de que en vista que se trata de una pequeña cifra fuese logrado el que tales documentos se confeccionasen por un maestro de obras de esta localidad y que la obra fuese adjudicada a este Ayuntamiento, acordándose a la vez que la inversión de dichas pesetas fuese preferentemente para el cercado de los terrenos ya adquiridos y de sobrar alguna cantidad, se invirtiese en los accesos a dicho Campo deportivo […]»[4]
Llegado a este punto, se comprendió que 10.000 m2 de superficie, en la que dibujar un campo de fútbol, era insuficiente si tenemos en cuenta que debía contar con espacio para contar con graderío para los espectadores, vestuarios, servicios y otras dependencias. Por este motivo se compraron con posterioridad otros trozos de terreno adjuntos con los cuales se pretendía salvar la situación. En noviembre de ese mismo año se compran otros 3.000 m2, situados al norte de los ya adquiridos, en el paraje llamado «Los Castillejos» en las condiciones siguientes:
«[sic] también se acuerda que se faculte al Primer teniente de alcalde D. Ramón Checa Luque, para adquirir una parcela de tierra de DOS MIL SETECIENTOS OCHENTA Y OCHO METROS CUADRADOS, SITA EN EL PARAJE ‘Los Castillejos’ partido de Pascual, de este término que linda al norte con terrenos adquiridos por el Ayuntamiento para campo de deportes, al sur con la servidumbre de ‘Los Castillejos’, al este con la carretera de La Roda de Andalucía, y al oeste con tierras de D. Juan León Pachón. Dicha parcela es de la propiedad de D. Antonio Acuñas Luque en usufructo vitalicio y de sus hijos D. José Antonio; Dª Mª Virtudes y Dª María del Carmen Acuñas García en unida propiedad por terceras partes indivisas, Los Sres. del Pleno acuerdan por unanimidad conforme a los preceptos del art. 13 […] efectuar esta compra mediante concierto directo por resultar inapropiadas e incompatibles las formalidades de subasta o concurso subasta por el precio de TRES MIL PESETAS (3.000’00), En el expediente incoado a consecuencia del acuerdo plenario correspondiente a la sesión extraordinaria del día diez de marzo de mil novecientos sesenta y siete por el que se resolvió adquirir la mencionada parcela, consta el informe pericial del Maestro de Obras de este Ayuntamiento en el sentido de que la parcela, por su proximidad al casco urbano, reúne muy buenas condiciones para adaptarla a construcciones u otras necesidades que el ayuntamiento tuviese y cuyo precio de tres mil pesetas es asequible en relación a los precios medios que se cotizan en esta localidad y en dicha zona, estimando que con su adquisición puede resolver cualquier problema del municipio por estar ubicado en inmejorables condiciones. Los Sres. reunidos acuerdan, por unanimidad, comprar por este Ayuntamiento la parcela descrita, facultándose expresamente al Sr. Teniente de alcalde D. Ramón Checa Luque para firmar la correspondiente escritura y gestionar cuanto sea necesario a los citados fines […]»[5]
Todo va rodando bien hasta que surge el primer inconveniente. Las 150.000 ptas. que se habían adjudicado de subvención, destinadas al cierre del terreno del Campo de Deportes, fue desviada a otros intereses al no someterse a los llamados Planes Provinciales. Al respecto, sobre este asunto leemos:
«[…] se dijo que la Comisión de Servicios Técnicos, en escrito fecha 13 de los ctes [refiérese a noviembre de 1967] daba cuenta de que aunque en principio había sido aprobado el Proyecto de las Obras al Campo Municipal de Deportes en 150.000 ptas. poco después, la Comisión Interministerial de Planes Provinciales había acordado no tramitar la misma por no corresponder tal clase de obra a las que prioritariamente deben ser atendidas con los fondos de Planes Provinciales; acordándose que se hagan algunas gestiones para ver la forma de que aquella subvención quede como beneficio para Fuente de Piedra, en cualquier obra que entre dentro de aquellos Planes […]»[6]
En noviembre de 1968, el Sr. D. Gabriel Valencia Reina tenía ultimado un anteproyecto para la creación de un Campo Polideportivo, valorado en tres millones de pesetas. El mismo fue presentado en la Delegación de Deportes de Málaga junto a una solicitud de subvención, haciendo constar que ya habían sido satisfechas cuatrocientas cincuenta mil ptas. en la adquisición de terreno y otros servicios; cantidad que debía tenerse en cuenta en el momento de establecer el porcentaje que correspondía a la entidad solicitante, o sea, al Ayuntamiento.[7]
Aun sin subvención, ahí estaba el terreno y por las tardes, la juventud, además de jugar, retiraba las piedras que en él encontraba y tras pasar por distintas etapas se llegó a conseguir un envidiable campo de fútbol dotado de césped artificial.
En esa evolución llegaría la valla que lo delimitaba y distintas ampliaciones que han permitido contar, además del campo de fútbol, con pistas de pádel; y un pabellón cubierto preparado con pistas adaptables de baloncesto, fútbol sala, tenis, balonmano, voleibol, y unas modernas instalaciones que conforman el conjunto del hoy llamado: Polideportivo Municipal José María Cañero.
Equipos locales formados en los años cincuenta
Fotos A. López: Diversos momentos relacionados con el fútbol
Polideportivo Municipal de Fuente de Piedra José María Cañero
Fragmento de Historia Temática Villafontense
Capítulo: Lugares con Historia
Los inicios del Campo de Fútbol
Francisco Muñoz Hidalgo
(Obra en composición)
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