FUENTE DE PIEDRA
Escultura Religiosa
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EL SAGRARIO
La primera referencia que tenemos del Sagrario la hace el canónigo e historiador Alonso García de Yegros, a finales del siglo XVII, quien en su Historia de la antigüedad y nobleza de la ciudad de Antequera dice respecto de la iglesia del pueblo lo siguiente:
«[sic] … Una legua más adelante está la población que dicen la Fuente de la Piedra, que es de más de cien vecinos. Hay en ella su Parroquia, y es la Iglesia de una nave, y en su altar mayor está el Sagrario; y tiene dos altares colaterales; en el del lado del evangelio está un Crucifijo, y en el de la epístola, Ntra. Señora del Rosario, con su cofradía […]»[1]
Parece ser que el Sagrario estuvo desde un principio ubicado en el altar mayor, si bien, en la década de los cuarenta descansaba sobre la mesa del altar adosada a la pared frontal, cambiando de ubicación cuando dicha mesa en los años sesenta fue desplazada de la pared, quedando exenta, lo que permite oficiar la misa de cara a los feligreses y en castellano y no en latín y de espaldas a los asistentes, como se venía haciendo según el rito romano tridentino, entonces vigente.
La parroquia contó con dos Sagrarios, uno en madera, dorado y tallado, que pervivió hasta final de la década de los setenta, ubicado en la capilla y utilizado solo en algunas festividades religiosas, como presidir el monumento que se levantaba en Semana Santa. El que alberga al Santísimo, en metal plateado, dorado y tallado, de más valor, tras la última reforma cambió su ubicación del altar mayor a la capilla donde aún permanece.
[1] GARCÍA DE YEGROS, A. Historia de la antigüedad y nobleza de la ciudad de Antequera. Antequera: Tipografía El Siglo XX, 1915, pp. 406-407.
Fragmento de Historia Temática Villafontense
Capítulo.- ESCULTURA RELIGIOSA:
El Sagrario
Francisco Muñoz Hidalgo
(Obra en composición)
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